La realidad de un sector que encuentra cada vez más dificultades para contratar y que, al mismo tiempo, busca caminos para abaratar –o al menos no subir mucho más– un producto final, la vivienda, al que muchas personas ya no pueden acceder en propiedad.
El clúster nace para fomentar la colaboración y la complicidad entre empresas que tradicionalmente se han visto unas a otras como competidoras.